RECLAMACIONES DE ESCASA CUANTÍA. COSTES DEL JUICIO

Una compañía aseguradora ha sido condenada a pagar los 500 euros a los que ascendían los daños causados por el vehículo asegurado, más los intereses y las costas procesales, incluyendo en estas últimas los honorarios del abogado y procurador que tuvo que contratar el demandante para efectuar su reclamación judicial.

El incidente que ocasionó los daños se produjo cuando la conductora del vehículo asegurado tiró al suelo una moto correctamente aparcada maniobrando marcha atrás para estacionar su turismo.  La conductora abandonó subrepticiamente el lugar, pero un testigo anotó la matrícula y se la proporcionó al dueño de la motocicleta, que denunció a la conductora y a su compañía aseguradora.

En el juicio, la aseguradora negó la realidad del siniestro, sin proponer más pruebas que el interrogatorio del propietario de la moto, quien precisamente no vio el accidente, y no presentó ningún testigo que pudiera apoyar sus afirmaciones; mientras que el demandante presentaba como testigo a la persona que presenció los hechos y le facilitó los datos.

El juez ha sido en su sentencia muy crítico con la  compañía aseguradora, por no evitar un litigio de apenas 500 euros acudiendo a un juicio cuyo coste aproximado se estima en 2500 euros, sin tener una base mínimamente sólida que justificase su posición y sin buscar alternativas para solucionar la controversia, como pudiera ser la mediación.

En este tipo de juicios por reclamación de daños, cuando la demanda resulta estimada, el demandado es condenado a las costas del proceso. Sin embargo, ello no suele incluir los honorarios del abogado y procurador de la parte demandante. Pero, en este caso, por las razones señaladas, el juez ha apreciado temeridad y mala fe en la aseguradora, por lo que ha decidido incluir tales gastos.

 

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